Informe epidemiológico | En este informe se presenta la evolución del VIH en el quinquenio 2016-2020 y la situación epidemiológica actual. Se elabora a partir de los datos obtenidos de las notificaciones recibidas en este periodo al Departamento de Vigilancia en Salud (DEVISA), al Departamento de Laboratorios de Salud Pública, a la Unidad de Estadísticas Vitales y al Área Programática de ITS VIH Sida (auditorias de embarazos, encuesta de monitoreo de TARV y notificaciones de VIH). Uruguay mantiene un patrón epidemiológico con prevalencias en población general menores al 1% y en poblaciones específicas mayores al 5%. Según las últimas proyecciones realizadas en febrero de 2021 con el software Spectrum y reportadas a ONUSIDA, se estima una prevalencia en población general de 0,4%. Entre 2016 y 2020, el Ministerio de Salud recibió un promedio de 902 nuevos casos de VIH por año. El descenso en 2020 en el número de notificaciones podría estar relacionado a la reducción en el número de testeo realizados como consecuencia de la pandemia COVID-19, fenómeno que también se observó en otros eventos de salud.
Estudio de estigma y discriminación | El presente estudio ha buscado identificar y caracterizar las denuncias sobre situaciones de violación de los derechos de las personas viviendo con VIH/SIDA, y también realiza recomendaciones tendientes a mejorar el abordaje, procesamiento y resolución de las mismas.
Guía de ITS | El objetivo de esta guía es constituir una herramienta para facilitar la prevención, el diagnóstico y tratamiento de las infecciones de transmisión sexual (ITS) en adolescentes, jóvenes y personas adultas que se atienden en el primer o segundo nivel de atención y definir una estrategia de vigilancia epidemiológica.
Guía sobre el TARV VIH | Las recomendaciones contenidas en este documento proponen una estandarización de planes de tratamiento, considerando que la gran mayoría de los pacientes se benefician de estos planes potentes, simplificados y tolerables, evitando la dispersión de la prescripción que atenta contra un uso racional de las herramientas terapéuticas que son finitas. El descenso de la morbi-mortalidad por VIH/Sida ha sido establecido como meta en nuestro país en el marco de los Objetivos Sanitarios Nacionales 2020, lo que se inscribe en compromisos internacionales como la Declaración Política de las Naciones Unidas sobre el VIH-Sida de 2016 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el 2030. En este contexto, se han acordado estrategias de intervención, fortaleciendo las acciones en prevención de ITS-VIH, tratamiento y apoyo a las personas afectadas. La universalización del tratamiento antirretroviral (TARV) se constituye en una de las estrategias priorizadas para alcanzar los mejores estándares de salud de los afectados y para detener la transmisión de la infección. Este último resultado ha comenzado a evidenciarse en nuestro país, donde en los últimos años se verifica un descenso en los nuevos casos de VIH y se ha alcanzado la meta de eliminación de la transmisión vertical en 3 años consecutivos.